Oaxaca, ciudad para vivirla y contarla
todooaxacaradio.com
29/septiembre/2014
Rubén Vasconcelos Beltrán
Cronista de la Ciudad y Miembro del Seminario de Cultura Mexicana
MI VISITA AL CECyTEO DE TLALIXTAC
El Ing. Luis Enrique Blanco Benetts director de esta institución tuvo a bien invitarme para platicar con los alumnos de esa casa de estudios sobre la historia de la Guelaguetza presentándome con ellos la coordinadora académica Patricia Castillejos López, por lo que les mostré una serie de fotografías que ilustran sobre el tema y que para todos los oaxaqueños es muy importante.
Por otro lado me permití felicitarlos por lo bien cuidado que tienen su plantel lo que demuestra un verdadero interés tanto de los directivos como de los maestros y alumnos en la preservación de su casa de estudios y porque muchos de los egresados han logrado concluir una carrera profesional y ahora se encuentran desempeñando tareas delicadas en diferentes campos de la actividad humana.
CON EL ING. JESUS GARCIA HERNANDEZ.
Lo anterior se relaciona con la agradable sorpresa que tuve hace unos días cuando me reuní con mis compañeros del Instituto de Ciencias y Artes del Estado y llegó nuestro amigo el Lic. Jesús García González, su esposa la doctora Judith Hernández Quiroz y su hijo Jesús, quien se fue de Oaxaca al concluir la preparatoria porque al revisar los planes y programas de estudio de las carreras que se llevaban en las distintas universidades locales no le despertaban ningún interés por lo que empezó a buscar otras opciones y decidió viajar a Tampico Tamaulipas y enterarse en el Tecnológico de Ciudad Madero sobre la carrera de Geólogo la que finalmente decidió estudiar.
Dice que primero cursó las materias comunes a la Geofísica que son muy relacionadas y a los dos años inició el estudio de la Geología, la que indudablemente era lo que él deseaba porque una parte de las materias las llevaban en aula pero la gran mayoría sobre el terreno práctico en donde en sito estudiaban las rocas, su origen, cómo estaban constituidas, el medio ambiente, las condiciones atmosféricas y muchos temas que inciden en este tipo de estudios “pero todo me parecía, dice, sumamente emocionante y todos los días había algo nuevo que llamaba mi atención y me llenaba de sorpresa”.
Comenta Jesús que para poder comprender lo tanto que se va presentando se debe estudiar profundamente la física, la química, la biología, hay que estudiar mucho, porque lo que está alrededor nuestro no es más que la consecuencia de una serie de fenómenos transformadores sucedidos en el transcurso de los años y esto no es más que la consecuencia de aquello, pero la verdad, dice, es apasionante. En esto ayuda mucho el hecho de contar con buenos conductores, buenos maestros, interesados en su tema, estudiosos, apasionados en los fenómenos porque eso se transmite a los alumnos que son los que absorben esas emociones, las experimentan y viven intensamente el estudio, el trabajo y por supuesto los logros que se van obteniendo.
El ingeniero Jesús recuerda con mucho cariño a sus maestros, entre ellos, a Cuauhtémoc Solís, en Geología Histórica, que se refiere al estudio de la tierra, su origen y su devenir; Estanislao Velásquez, en Geología del Petróleo; Enrique Aguilera Hernández, Geología I y II: Carlos Hermoso de la Torre, Estratigrafía; Adolfo Hinojosa, Registro de Pozos de Petróleo; Raimundo Alegría, Petrografía, que se refiere al estudio de las rocas; César Viggiano, le impartió la materia de Petrología. El director en aquellos tiempos era el maestro David Zepeda Sánchez, y aunque la carrera no hacía mucho tiempo que se había fundado, pues esto fue en 1972, pronto adquirió un gran prestigio académico, afortunadamente muchos maestros que habían estudiado en la UNAM y en el Politécnico Nacional aceptaron irse a Ciudad Madero y hacerse cargo de la impartición de las materias y eso le dio un gran prestigio a la carrera.
En la actualidad ya existen otras instituciones que contemplan la carrera, por ejemplo, la Escuela de Minería de San Luis Potosí, que es muy parecida; en Chihuahua; Villahermosa, Tabasco, Ciudad del Carmen; Ensenada, Baja California y a pesar de ello comenta el ingeniero que existe un gran déficit de geólogos en el país, por lo que las empresas nacionales y transnacionales tienen que contratar especialistas en Venezuela, Colombia y Argentina, desafortunadamente tampoco hay suficientes ingenieros petroleros. De su generación fueron doce, comenta, de los cuales 8 siguen activos en su especialidad y los otros se aplicaron en otros campos porque no es fácil se necesita de mucho empeño y mucho sacrificio pero es muy estimulante por la gran cantidad de experiencias y conocimientos que se obtienen.
Al salir de la escuela trabajó como Topógrafo en la construcción de un dique seco en Ciudad Madero lo que aprovechó como tema para su tesis profesional, titulándola: Estudio Geológico del Área Río Verde, en San Luis Potosí, que es la propuesta de perforar un pozo petrolero en ese lugar, pues había suficientes razones para ello, inclusive en ese entonces ya había personal especializado de Petróleos Mexicanos haciendo estudios y ellos le facilitaron información para que sustentara su trabajo.
En 1982 fue aceptado en PEMEX después de haber presentado y aprobado los exámenes que le pusieron y fue asignado a Ciudad del Carmen a las plataformas marinas de perforación de pozos exploratorios, que en esos años recién había iniciado la marina. Ahí se dedicó a llevar el control geológico de los pozos lo cual implica analizar las muestras que va produciendo el barrenado de las rocas con el fin de saber de qué tipo es y su edad geológica a través de la aplicación de la paleontología que es la que permite determinar la edad de las rocas hasta llegar al objetivo y cuando esto sucede se llena de cemento el espacio entre el ademe y la pared del pozo para que se pueda sacar con facilidad el petróleo. En seguida fue asignado al área de realización de estudios de paleocimentación, esto es, la determinación de los tipos de roca, su conformación física y química, edad, y consistencia, con el fin de determinar la posesión de la roca almacenadora y con base en ello ubicar los pozos de desarrollo para extraer el petróleo. En esta área estuvo cinco años para luego integrarse al grupo de trabajo dedicado a la caracterización de yacimientos lo que quiere decir que una vez que un pozo exploratorio encontraba un nuevo yacimiento había que estudiar las rocas en cuanto a su porosidad, permeabilidad, porcentaje de aceite y hacer una proyección de su capacidad en cuanto a volumen de hidrocarburos lo que se llama reserva. El grupo se dedicaba al estudio de los yacimientos de la región marina de Campeche cuando lo principales yacimientos se encuentran en brechas carbonatadas, carbonatos naturalmente y carbonatados fracturados o en rocas terríjenas como la arena, llegando a ser el coordinador del grupo técnico científico en el 2001.
Posteriormente es transferido al Activo Integral Cantarell, que es el mayor yacimiento que se ha tenido convirtiéndose en el líder de geociencias del activo de producción, por lo que su tarea era realizar los estudios de ingeniería y geología geofísica, que daban soporte a la explotación del yacimiento, lo que incluía el diseño del pozo, control geológico de los pozos de desarrollo y la búsqueda de nuevos bloques de roca para la explotación, esto durante diez años, a esa época se le llamó el bum petrolero en Campeche, porque se perforaron cuatrocientos pozos en el año.
Trabajar en estas tareas significa muchas cosas para cada uno de los participantes, desde volverse un amante fiel de la naturaleza, de su belleza, de la inmensidad de misterios del mar, hasta el tratar de absorber los conocimientos científicos que en la materia se van dando en cientos de lugares alrededor del mundo, porque cada acción es alguno nuevo, que empuja a nuevos retos, pero cuando se quiere el trabajo, cuando la tarea que se realiza es parte esencial de nuestra vida, no hay obstáculos, más bien hay cientos de alegrías, de sorpresas, de realizaciones, de un sentimiento del deber cumplido que no tiene parangón, pero también del estar consciente de que la naturaleza y sus misterios están mucho más allá de nuestro alcance pero ese es el reto y lo que aspiramos es que la vida nos dé la oportunidad de conocer más y más sabiendo que tenemos un límite físico al cual no podemos renunciar pero esperamos que vengan otros que tomen la estafeta y se lancen a la lucha con dignidad, con decoro, con profesionalismo, para seguir adelante pues esto no tiene fin.
El Ing. Jesús González se casó con la señora Silvia DLeija Coma, de Tampico Tamaulipas, y tiene dos hijos, se llaman Jesús Antonio y Jesús Alberto, el primero de ellos terminó la carrera de Ing. Industrial y el otro es Geólogo, ambos del Tecnológico de Ciudad Madero, el primero tiene 29 años y trabaja en la ciudad de México en una empresa constructora de plantas de refinación, actualmente construyen las plantas de Duba de Diessel ultra bajo en azufre en Cadereita, Tula Hidalgo y en Salina Cruz y el segundo de 25 años, se está iniciando en una empresa transnacional.
Cuando se tiene la oportunidad de conocer y platicar con jóvenes hijos de amigos y compañeros y se sabe de lo tanto que han hecho y están haciendo en terrenos tan especializados da mucho gusto y se llena uno de orgullo y se quisiera que no sólo fuesen ellos sino todos los jóvenes que hoy están en las aulas universitarias o tecnológicas para que se pudiese sustentar el desarrollo y crecimiento que tanto anhelamos.
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