¿HAS PERDIDO TUS DETALLES?

[adrotate banner="12"]

¿Por qué es importante Francisco Picaluga para Huatulco?

por / sábado, 29 noviembre 2014 / Publicado enTURISMO

(www.eloriente.net, México, 29 de noviembre/2014).- En 1830, tras nueve años de la consumación de la Independencia de México, la inestabilidad política y social del naciente país ocasionó la Guerra del Sur. Este conflicto armado enfrentó a Vicente Guerrero contra Anastasio Bustamante, iniciado en diciembre de 1829 con la proclamación del Plan de Jalapa, que destituía a Guerrero como Presidente; Bustamante aprovechó para asumir la titularidad del Poder Ejecutivo. Los simpatizantes de Guerrero se pronunciaron mediante el Plan de Codallos en marzo de 1831. En la costa del océano Pacífico se habían confrontado las fuerzas bustamantistas al mando del comandante Nicolás Bravo contra las fuerzas guerristas al mando de Juan Álvarez.

El 23 de junio de 1830, el comerciante genovés Francisco Picaluga, habitual transportista de mercancías entre Guayaquil (Gran Colombia) y Acapulco, ancló en este puerto mexicano siendo dueño y capitán del bergantín Colombo. El marino adeudaba los derechos de aduana del cargamento que transportaba, los cuales ascendían a un monto de 2000 pesos, debido a ello, fue asediado constantemente por el Ministerio de Hacienda. Durante su estancia, también entabló amistad con Vicente Guerrero a quien le trasladaba pertrechos y distintos recursos materiales desde otros puertos del Pacífico, lo cual no podía impedir el gobierno usurpador de Anastasio Bustamante, por carecer de Marina. Estas relaciones comerciales propiciaron la confianza de don Vicente en el marino italiano.

Cuando el ministro de Guerra José Antonio Facio se enteró y valoró esta situación, se propuso sacar provecho del marino. Con la intención de negociar el costo de los derechos de aduana, Picaluga viajó a la Ciudad de México haciendo escala en Chilpancingo, en donde Nicolás Bravo le otorgó un salvoconducto y le dio instrucciones para contactar a Facio. El ministro propuso al marino un plan para apresar a Vicente Guerrero, Juan Álvarez y los demás jefes de rebelión. Al principio, Picaluga se mostró ofendido pero tras ofrecerle un pago de 50 000 pesos, Picaluga aceptó la propuesta.

Abrazo_de_Acatempan

Imagen: hu.wikipedia.org

El 14 de enero de 1831 (otra fuente señala que fue 31 de enero), Guerrero aceptó la invitación de Picaluga para comer en su barco. El bergantín Colombo levó anclas y zarpó con dirección a Huatulco, arribando seis días después a su destino. Allí los esperaban los oficiales de las fuerzas bustamantistas y Picaluga entregó a Vicente Guerrero. Desde entonces, esa playa de la costa oaxaqueña es conocida como La Entrega. Tras un juicio militar sumario e irregular, el juez fiscal Nicolás Condelle sentenció a muerte a Guerrero, la ejecución se llevó a cabo el 14 de febrero de 1831 en Cuilápam.

La figura de Picaluga fue repudiada en México e Italia, se llegó a acuñar el término picalugada como sinónimo de traición. Don Enrique de Olavarría y Ferrari, en el 4º tomo de México a través de los siglos, expresa no haber tenido más noticias de Picaluga, ni encontrado documento alguno que diera luz sobre su paradero después de haber consumado su incalificable acto. El personaje se volvió interesante y muchas versiones se tejieron sobre su vida después de la traición:

  • Que volvió a Génova en 1832, en donde lo apresaron y compareció ante el Real Consejo del Almirantazgo; conenado a muerte, logro escapar de prisión y vivió sus últimos años en la ciudad turca de Esmirna.
  • Que Francisco Picaluga nunca volvió a Génova, pero el Real Consejo del Almirantazgo, sumamente indignado por los hechos que le fueron dados a conocer, juzgó a Francisco Picaluga en ausencia, y en esas condiciones emitió el veredicto conocido, el cual fue acreditado en nuestro país y en muchos otros; sin embargo, el sentenciado –perdido en el mundo para la justicia– jamás purgó ninguna pena, ni reparó algún daño para los herederos de Guerrero.
  • En la obra de José María Bocanegra titulada Memorias para la Historia de México Independiente (1862) se lee: “el reo condenado a muerte por el Almirantazgo de Génova, se hallaba en Siria”, y se decía que era reclamado por el gobierno genovés.
  • Don Manuel Payno, en su obra Episodios históricos de la Guerra de Independencia, decía al respecto lo siguiente: “La existencia de Picaluga es, en efecto, un misterio. Unos dicen que se le ha visto, años después, en las calles de la Ciudad de México; otros, que se hizo mahometano y vive en un serrallo de Turquía; algunos más, aseguran que varios mexicanos lo han visto en un convento de Tierra Santa, con una larga barba y un tosco sayal, haciendo una vida de penitencia para expiar en esta tierra el horrendo crimen que cometió”.
  • Que se fue a radicar al Puerto de Mazatlán, en donde terminó su vida suicidándose. Esta versión ha cobrado veracidad en últimas fechas gracias a un artículo publicado póstumamente en 1969 a Amado Aguirre en el libro Antología literaria. Recopilación de discursos, artículos y poemas de la Asociación de Diputados Constituyentes realizado a partir de una investigación de muchos años por él mismo. Según Aguirre, Picaluga cambió su nombre por el de Juan Pazador y tras una seguidilla de malos negocios que lo llevaron a la ruina, decidió quitarse la vida.

— Oaxaca Digital (@Oaxaca_Digital) octubre 21, 2014

 

*Foto: Ginkgo 2005

Comentarios

comentarios

Etiquetado bajo:
SUBIR