OAXACA, CIUDAD PARA VIVIRLA Y CONTARLA 24/05/2015
todooaxacaradio.com/Rubén Vasconcelos Beltrán
24 de agosto del 2015
OAXACA, CIUDAD PARA VIVIRLA Y CONTARLA
El viernes 15 de agosto, tuvo lugar una reunión en el edificio que ocupa la Facultad de Arquitectura “5 de Mayo” de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca, en la cual tomó la protesta de honor la nueva mesa directiva del Colegio de Arquitectos de Oaxaca, que encabeza el arquitecto, Alfredo Juan Carreño León, quien se ha destacado en el ejercicio profesional sobre todo en el ámbito de la restauración de nuestros edificios patrimoniales, por ejemplo a él le correspondió hacer los últimos trabajos de mejoramiento de la imagen urbana de las calles de Gurrión y primera de Constitución, los del jardín Antonia Labastida, el templo de la Virgen del Patrocinio y la Plaza Pública de San Pablo Guelatao, así como otras más, por lo que cuenta con el reconocimiento de los agremiados al Colegio, pero además ha sido catedrático de diversas materias en su casa de estudios.
A esta reunión tan importante asistieron: la señora presidenta de la Federación de Colegios de Arquitectos de México, maestra Isabel Espinosa Segura, el arquitecto Sergio Pimentel Coello, secretario de las Infraestructuras y Desarrollo Urbano del Gobierno del Estado; el director de la facultad, maestro Jesús Pablo Hernández y otras personalidades como los ex presidentes del Colegio, y un gran número de alumnos, quienes fueron testigos de honor de la firma de un convenio de colaboración entre el presidente del Colegio y el director de la Facultad, para que los alumnos y colegiados tengan la oportunidad de participar en las actividades de carácter académico que promueven, así como facilitar el acceso a los educandos a las obras que se realicen para que vayan aplicando sus conocimientos y aprendiendo de la realidad, lo cual permitirá tener profesionistas mejor preparados, conocedores de su trabajo, emprendedores, responsables y deseosos de servir.
Fue notable la presencia de dos reconocidos maestros en la arquitectura, originarios de la ciudad de Puebla, conocedores de lo que ha sido la evolución histórica de la arquitectura en México y en el Mundo, defensores de nuestro patrimonio, y sabios maestros, autores de libros, responsables y comprometidos con nuestro haber cultural y me refiero a Leopoldo A. García Lastra, quien se ha distinguido en el terreno de la Investigación y Restauración de Monumentos; catedrático de la Universidad Popular del Estado de Puebla en el diplomado en Arte Sacro, en Arte del México Indígena y en Imaginería Virreinal; director de la Escuela-Taller de Restauración de Puebla y de Oaxaca, entre otros cargos, quien ofreció una conferencia muy interesante sobre las Cúpulas en Puebla, Oaxaca y Chiapas.
El maestro José Terán Bonilla, es un reconocido maestro e investigador quien ha dedicado mucho de su vida al estudio de la arquitectura, de la restauración, preservación de nuestro patrimonio cultural desde el Instituto Nacional de Antropología e Historia. Cuenta con diversos cursos de maestría y doctorado, y fue quien abordó dos temas que llamaron poderosamente la atención, el primero referido a “Los gremios de los arquitectos en la época colonial, antecedente de los colegios de arquitectos” y “La arquitectura en contextos históricos”, en éste demostró que conoce a detalle lo que es nuestra ciudad, y las diversas regiones del estado; nos habló de lo que se denomina Arquitectura de Integración, tema que se ha ido olvidando con el paso del tiempo, pero que es uno de los aspectos más sobresalientes en los que se basó la UNESCO para inscribir en la Lista del Patrimonio Mundial al Centro Histórico de la Ciudad de Oaxaca y que se refiere a la armonía que debe haber entre uno y otro elemento de los que conforman la arquitectura de un centro urbano.
Aunque cada una de las casas es diferente a la otra, en conjunto debe lograrse armonía, porque esto es la consecuencia de que se cuidó que la altura fuese la misma, que los vanos de puertas y ventanas se correspondan, que el color que se usó en las fachadas es cercanamente igual; en cambio hay calles en donde una o dos de las construcciones que en algún momento se hicieron rompen con la armonía por su tamaño, por su color, altura, diseño, materiales utilizados o ubicación geográfica. Por ejemplo, el edifico que está en la esquina de Colón y Melchor Ocampo; el edificio que conocimos como de Montajes y Maquinarias, en la esquina de Bustamante y Las Casas, o el edificio de la esquina de “5 de Mayo” y Morelos, son algunos de los tantos ejemplos existentes ya que es fácilmente observable como rompen con la armonía arquitectónica de conjunto.
Fueron muchos los ejemplos que el maestro Bonilla dio en esta conferencia y que estoy seguro hizo pensar al público asistente y principalmente a los arquitectos y alumnos, porque este es y será un tema recurrente por siempre en Oaxaca dada la calidad de ciudad que está considerada y porque finalmente son ellos los que tienen que ver directamente con el cuidado y preservación de nuestro patrimonio edificado y el entorno. Son los maestros, los directores, todos, los que deben estar atentos a las diversas corrientes que surgen en el mundo cuyo propósito es la preservación del patrimonio edificado, mueble o inmueble, ecológico, para que lo que se ve, se escucha, se aprende, se intuye, forme parte de los planes y programas de estudio, pero también sean preocupación de los gobernantes.
EL ZÓCALO SE DESALOJÓ
La noticia del lunes 17 muy temprano fue el desalojo por las fuerzas policiacas de los vendedores ambulantes del Zócalo y la Alameda, medida que desde hace mucho tiempo la esperaba la gente y principalmente los que trabajan o habitan en el corazón del Centro Histórico. Las quejas de los comerciantes, de los trabajadores, turistas, eran frecuentes; en repetidas ocasiones los empresarios organizados hicieron ver el daño que todo esto causa al buen desarrollo de la economía por lo que no era posible seguir soslayando esto se convirtió en un verdadero problema, porque no sólo es lo económico, sino también es de salud, de imagen, de cancelación de empleos, de cierre de empresas, de incertidumbre, y esto nunca los ambulantes quisieron entenderlo y convirtieron el Zócalo y la Alameda en un mercado no digno de una ciudad como la nuestra con un reconocimiento internacional por su cultura, por sus costumbres, por su belleza, que produce y debe producir a muchos lo necesario para su supervivencia.
Qué pena que hayamos llegado a que para todo se tenga que hacer uso de la fuerza pública; que los policías custodien las radiodifusoras, la Alameda, el Zócalo, las calles, para que vivamos en paz, y todo por nuestra falta de interés, por nuestras necedades, o nuestra indiferencia, por nuestra falta de deseos de trabajar y de empeñarnos en mejores causas, porque la falta de observancia de la ley siempre nos conducirá al caos, nunca a buenos resultados, para ello debe haber orden, corresponsabilidad, solidaridad, unificación de criterios, de puntos de vista, de alteza de miras, de grandes propósitos.
Según el Ing. Ignacio Santillana Suárez del Real, secretario de Servicios a la Comunidad, el procurar lo mejor para los ciudadanos, cuesta mucho dinero, esfuerzo, dedicación, capacitación, y sacrificio, porque son cientos los servicios que deben de prestarse a la población, por ejemplo, la limpieza que se inicia desde las primeras horas del día para que a las ocho o nueve de la mañana la ciudad luzca en todo su esplendor e invite al trabajo; el retiro de la basura, el regado de los jardines, las composturas de lo que le corresponde al Municipio con respecto al fluido eléctrico y la iluminación, la limpieza y cuidado de los jardines, la poda y retiro de árboles y más en este tiempo de lluvias torrenciales las cuales provocan el derrumbamiento de ramas u árboles completos, y la verdad, dice el Ing. Santillana, el personal del Ayuntamiento nunca será suficiente para hacer todo el trabajo que se requiere, por eso, su llamado al apoyo, a la colaboración de la ciudadanía, para que juntos logremos hacer de la ciudad, una ciudad más bonita, vivible, disfrutable, que nos sintamos más orgullosos de ella.